AMOR DE VERDAD
¡Lo tengo clarísimo!
Terminó la inútil etapa
de ser magnánimo
ante la ingratitud.
Mis sentidos, dolidos,
al fin han madurado.
Reclaman correspondencia.
Y sus filos son tajantes.
Atenderé a quien me atienda.
Escribiré a quien me escriba.
Pensaré en quien me piense.
Buscaré a quien me busque.
Adiós a martirizarme
confiando en el desprecio,
en el gesto más barato
que se arroja, en el barro
de las personas insensibles.
Para esas, rotundo silencio.
Dedicaré mi cariño
a quien de verdad lo aprecie,
a quien de verdad lo necesite
y lo reciba sonriente
entregando a cambio el suyo.
Es el principio de todo amor.
Y mi corazón solo quiere amor.
Autor: JOSÉ RUIZ
Es bien sabidoi
ResponderEliminarque el amor no se compra, menos se vende,,,
sencillamente se da
en todo orden de cosa
de lo que hacemos igual
pues nosotros somos ese primer amor inolvidable
y mas de las veces eso nos debería bastar ...
un abrazo.